"No podemos invisibilizar esta realidad"

Ainara Arregi

Hilanderas, así es como se conoce el centro temporal de atención humanitaria de las personas migrantes, ubicado en la calle del mismo nombre de Irún y que gestiona la Cruz Roja de Gipuzkoa. En el 2021, 8.000 personas han pasado por dicho centro humanitario. Para conocer los detalles de éste servicio, hemos entrevistado a Nahia Díaz Corcuera, responsable autonómica de programas de asilo y atención humanitaria de Cruz Roja.

¿En qué consiste el centro temporal para los migrantes en tránsito de Irún? ¿Cómo es su funcionamiento?

Este recurso está dentro del programa de Atención Humanitaria a Inmigrantes y es un programa que financia el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social e Inmigraciones del Gobierno de España. Dentro del programa de Atención Humanitaria, atendemos a todas las personas que entran al territorio nacional, fundamentalmente por costa, pero también por las fronteras terrestres de Ceuta y Melilla. Desde la acogida en costa, que sería la primera atención, pasan a una serie de dispositivos de acogida de distintas características, en función de las necesidades de las personas. En esos dispositivos, desde donde se hace la identificación de perfiles vulnerables, se identifica si tienen redes de apoyo tanto familiares o sociales en otros puntos del territorio nacional. En ese momento, es cuando las personas nos solicitan que su voluntad es acercarles a esos puntos para reencontrarse con las redes de apoyo, y Euskadi es uno de los destinos de las redes de apoyo. Cuando se les proporciona el traslado para acercarles, se les informa de estos recursos y servicios que disponen los centros, en este caso el de Irún, para que en caso necesario tengan un punto de referencia para poder acercarse y solicitarles el apoyo que precisen. Así es como conocen cual es nuestra ubicación en Irún.

Las personas llegan, habitualmente de manera espontánea, aunque es verdad que tenemos una comunicación muy estrecha con nuestros compañeros, principalmente de Andalucía, pero también de Canarias u otros puntos del territorio nacional, porque nos van reportando si hay grupos de personas que tienen previsión de que van a llegar, o si hay perfiles especialmente vulnerables, con el fin de reconducir las intervenciones y sean lo más individualizadas posibles. 

Posteriormente, se les hace una pequeña acogida, que consiste en la recogida de datos, para tener una base de datos sobre las personas que van pasando por el recurso, algunas vienen documentadas, otras nos manifiestan que no tienen ningún tipo de documentación porque la han extraviado. En esos casos, lo que hacemos es un contraste en diferentes bases para tratar de identificarle y conocer cuál ha sido su trazabilidad, para tratar así de dar una respuesta global y dar una continuidad a la intervención que ya se haya podido iniciar en esos territorios de origen. Este dispositivo está pensado para la gente que está de paso, para la gente que tiene claro que quiere continuar su proceso de viaje hacia Europa, porque como ya he comentado anteriormente, tienen sus redes de apoyo. Por tanto, es un recurso que aunque tiene unas instalaciones cómodas y muy humanas, si es verdad que es un dispositivo que lo que realmente pretende es ofrecer una zona wifi y recarga de teléfonos móviles, que es una de las principales demandas de las personas que llegan, una zona de duchas que compaginamos con las entregas de vestuario para que puedan cambiarse, y la zona de pernocta. Al margen de ello, si una persona tiene una necesidad médica, se hacen acompañamientos a centros hospitalarios, si tienen necesidades farmacológicas, se tramitan las recetas, se compra el tratamiento que deba comprarse, y finalmente, la observación del equipo técnica, que está muy pendiente de todos aquellos perfiles que sean susceptiblemente vulnerables para que siempre se les trata de reconducirles hasta las casas de acogida, para que pueda haber una intervención individualizada, y no exponerles a situaciones de mayor vulnerabilidad. 

Dices que son estancias cortas. ¿De cuánto tiempo estamos hablando?

Hay quien no hace ni una pernocta pero, de media, podemos decir que son 3 noches. Es verdad que cada persona tiene sus tiempos, el estado físico en el que llega puede ser distinto, porque sus contactos se hayan demorado en el tiempo, etc.

¿Cuáles son los requisitos para poder acceder al centro de atención de Irún?

Si es una persona que está dentro del programa de Atención Humanitaria, ha tenido que ser una persona que ha entrado a la península bien sea por costa, o las fronteras terrestres de Ceuta y Melilla. Habitualmente, lo que solicitamos es que la persona pueda estar identificada, por cuestiones de seguridad, y para garantizar la trazabilidad y la intervención con las personas. Es verdad, que a veces se hacen excepciones y no siempre, nos podemos ceñir a los regímenes tan estrictos a los que nos debamos ceñir. Somos una organización humanitaria, y como tal entendemos, que hay que atender a la persona que tenemos delante, más allá de los criterios de un documento.

¿Cuál es el perfil de las personas que llegan al centro?

Principalmente, de origen subsahariano hasta ahora, que coincide con el perfil de las personas que entrar por costa: hombre sólo, mayoritariamente, aunque a veces también llegan mujeres, mujeres embarazadas, mujeres con menores, pero la cifra no alcanza ni mucho menos la de hombres solos.

Guinea, Costa de Marfil y Mali pueden ser las principales nacionalidades, aunque, estamos empezando a ver como tendencia, que empiezan a llegar más de Argelia, Marruecos. Es gente muy joven. Hay que pensar que las condiciones para hacer tal viaje migratorio no son fáciles, y de sobra es conocido, el número de muertes que se han producido en el 2021, en lo que denominamos ruta canaria. Principalmente, es gente joven, en buen estado físico y que tiene capacidad de aguante.

Y en cuanto al destino. ¿Sabemos a dónde se dirigen?

El tiempo de estancia en este recursos es muy corto, por lo que, apenas nos da tiempo a interactuar mucho con ellos. Tenemos claro en qué frontera estamos y creemos que serán centro y norte de Europa, pero no podríamos hablar de un destino en concreto. 

¿Qué consejos o pautas ofrecéis a la personas en tránsito que llegan al centro de Irún?

Tal y como he comentado, nosotros apenas interactuamos con ellos, pero desde que el mes de marzo, tuvimos el conocimiento de la primera persona fallecido en el Bidasoa, y a la vista de que esto podría ser una tendencia, hacemos mucho hincapié, mucho trabajo de sensibilización en evitar en la medida de lo posible, rutas peligrosas como esta. Es verdad que en eso hacemos mucha incidencia y en cada conversación que tenemos con ellos, les insistimos en la paciencia, en la prudencia y en que no se confíen cuando lleguen allí y vean que puede ser algo sencillo, pero que realmente no lo es. 

De las personas que han perdido la vida en el Bidasoa, ¿alguna de ellas ha pasado por éste centro de Irún?

Sí, las dos primeras sí. Aunque a lo largo del 2021, hayan pasado 8.000 personas por el centro, para los equipos estos sucesos son muy difíciles, porque estamos hablando de personas, y no podemos invisibilizar esta realidad, no nos podemos hacer inmunes a esto que está sucediendo. Después de estos hechos, las propias personas en tránsito, sufren mucho; la información fluye mucho mediante las redes sociales, y por tanto, esos días, el estado anímico de las personas que veía más decaído. 

Las personas que han sido devueltas a Irún por la policía francesa, ¿Vuelven a pasar por el centro?

Es posible que las personas no consigan su objetivo en un primer intento. Aunque estemos dentro del territorio Shengen, Behobia sigue siendo una frontera, que tiene sus controles de cara a la pandemia del Covid 19 y otros controles de índole socio-políticas, que lo condicionan también. 

No todas las personas que regresan al centro de Hilanderas nos informan sobre su motivo de re greso; puede ser porque aún no han encontra do su momento de intentarlo, porque no han conseguido avanzar en Francia… Tampoco hacemos preguntas concretas al respecto. Son libres de contarnos hasta donde ellos lo decidan.

¿Qué pasa con la gente que decide quedarse?

Nosotros hacemos más incidencia para tratar que se queden con las personas más vulnerables; si una persona nos solicita que se quiere quedar, nosotros hacemos todo lo posible para activar todos los sistemas a los que pudiera acceder, y faciliten esa alternativa. No son muchas personas las que solicitan quedarse.

¿Las mujeres solas o las mujeres con niños también continúan hacia Europa?

Nosotros intentamos entrevistarles individualmente a mujeres solas y mujeres con niños para tratar de que acudan a una plaza de acogida, porque creemos que si de por sí el colectivo es vulnerable, en estas circunstancias lo es aún más. Hacemos énfasis en tratar de cambiar esa decisión. 

¿Dónde quedan los derechos de todas estas personas?

Desde Cruz Roja siempre ha sido y es un compromiso el informar y velar por el cumplimento de los derechos de todas las personas. Aterrizando al marco concreto, procuramos que la decisión final de las personas haya podido ser tomada habiendo sido informada y por tanto conociendo los derechos que les asisten.

¿Cómo se prevé el 2022?

Es muy complicado tener una previsión, Irún en este caso es un reflejo de las entradas que se registran bien sea por Costa, Ceuta y Melilla. En este sentido, para nosotras y nosotros, resulta fundamental la buena colaboración y coordinación con los equipos que están a pie de terreno en las acogidas, para conocer la evolución de llegadas y tratar de prever posibles nuevas necesidades que podamos anticipar y con ello tener la estructura necesaria para dar la respuesta humanitaria que merecen.