"Es bueno que alguien me controle para crear una base buena y poder salir adelante"

Ainara Arregi

Manuel Luis Triñanes Outeda tiene 42 años, y aunque actualmente está a las puertas de conseguir la libertad total, ha pasado más de media vida entre rejas. Ahora convive con otras 7 personas en el piso que la asociación Arrats tiene en Lasarte Oria. 

Nos citamos con Manuel Luis Triñanes Outeda en Lasarte Oria, en el piso que la asociación Arrats abrió en mayo de 2022 para facilitar la reinserción social de las personas presas y que se encuentran a las puertas de conseguir la libertad, tanto semi-libertad como la libertad total.

Manuel Luis llegó unos pocos días más tarde de que Arrats iniciara este servicio en Lasarte Oria. Actualmente comparte vivienda con otras 6 personas, que al igual que él están en tercer grado penitenciario y ocasionalmente, también conviven con ellos, las personas que están con permiso penitenciario. En cada turno de mañana, tarde y noche, 2 educadores sociales se encargan de guiarles y ayudarles en el proceso de reinserción socio-laboral.

El día a día en el piso compartido es muy sencillo, según Manuel Luis. Cada conviviente cumple con sus obligaciones diarias; algunos van a trabajar, otros asisten a cursos de formación, etc. En cuanto a las tareas domésticas, impedientemente de las obligaciones personales, las realizan en base a un calendario, que tal y como nos comenta Manuel Luis, lo cumplen sin problemas. Entre semana, las comidas y cenas las preparan por turnos, y el sábado, al igual que en otros muchos hogares vascos, es día de limpieza general, que también la realizan organizadamente, y programan los turnos de cocina y los menús de la siguiente semana.

Al tratarse de una vivienda de reinserción, los convivientes cuentan con permisos especiales para poder salir de la vivienda durante un periodo concreto; se trata de un permiso individualizado a cada persona. Dependiendo del tiempo restante de condena, y su historial, algunos pueden salir por horas o incluso días, pero siempre con la condición de que deben llegar a casa para la hora establecida por los educadores sociales. Según nos relata Manuel Luis, "debido a mis errores que me han llevado a prisión reiteradamente, la Junta de Tratamiento Penitenciario no tenía muy claro si concederme venir a este recurso de Arrats, pero al final me lo concedieron". En mayo conseguirá la libertad total, y entonces se le plantea uno de sus mayores temores y problemas, y es que, tiene que conseguir un nuevo piso para vivir, a falta de apoyo familiar. Uno de los mayores miedos de Manuel Luis es que siente la necesidad de que alguien le controle para no volver a recaer en problemas que le lleven a prisión de nuevo, "es bueno que alguien me controle para crear una base buena y poder salir adelante, y aquí, en este piso de Arrats eso lo tengo", comenta Manuel Luis. Debido a su historial delictivo tiene deudas económicas a pagar, y quiere solventar ese problema cuanto antes, por lo que, opina que lo mejor para él es seguir en un piso tutelado. "Actualmente estoy de baja por una intervención quirúrgica, pero he estado trabajando y con lo que voy ganando quiero ir pagando las deudas, pero para eso necesito que me controlen. Tengo miedo de quedar en libertad y no saber controlar la situación y volver a recaer en problemas" se sincera Manuel Luis. Él agradece el control y el asesoramiento que los educadores sociales les ofrece en el piso de Lasarte Oria, en cuanto a materia económica se refiere, aunque tal y como reconoce el propio Manuel Luis le está constante bastante amoldarse a esas condiciones: "aquí te dan un presupuesto de 200 euros al mes, y tienes que ajustarte a ese presupuesto, a no ser que sea algo super necesario". Nos cuenta satisfecho que el mes pasado gastó 180 € por lo que ha ahorrado 20 €, "y eso para mí es un gran logro. No cambio esta vida de estar tirado y sin dinero, pero pudiendo pasar por delante de la policía sin problema, por la otra vida de tener mucho dinero, pero no saber gestionarlo y derrocharlo", añade.

Actualmente, el sistema penitenciario ofrece la opción de solicitar alargar la estancia en pisos de incorporación social otros 6 meses más, solicitud que hay que realizar 4 meses antes de conseguir la libertad total, y Manuel Luis se encuentra a la espera de respuesta, "si no me conceden la plaza, no hay más opciones", añade nuestro protagonista. En este sentido, su mayor objetivo es finiquitar las deudas económicas, y que en el futuro, los bancos le confíen una pequeña hipoteca para poder comprar un pequeño local e ir arreglándolo como vivienda poco a poco. "Con las deudas que tengo hoy en día, no puedo solicitar un préstamo o hipoteca, por lo que, como mucho, espero seguir teniendo trabajo y poder alquilar una pequeña vivienda", especifica Manuel Luis. Hasta que llegue ese momento de tener que abandonar el piso de Lasarte-Oria, Manuel Luis vive muy a gusto en el piso, le parece un "lujo" poder vivir así.